Plan Regional de Turismo de Sinaloa

Plan Regional de Turismo de Sinaloa

El potencial turístico de Sinaloa radica en su abundancia natural. Los paisajes costeros, llanos y montañosos del estado existen en bandas paralelas conectadas por sistemas fluviales que fluyen hacia el océano Pacífico. Esta riqueza geográfica incluye tierras agrícolas productivas, pastos para ganado y granjas de mariscos que ocupan las llanuras y colinas entre las montañas y la costa.
Nuestro enfoque de planificación regional utiliza estos sistemas naturales como base para el desarrollo del turismo sostenible. Identificamos cómo los recursos existentes y los patrones de asentamiento pueden apoyar diversos grupos turísticos. Pueblos mineros históricos como Cosalá y El Rosario ofrecen experiencias de patrimonio cultural, mientras que las zonas costeras como Playa Colorada presentan oportunidades de ecoturismo que respetan los ecosistemas marinos.

El plan de acción organiza el desarrollo en torno a cinco grupos estratégicos: nodos ecológicos, rurales, culturales, de negocios y costeros. Cada grupo se basa en los activos comunitarios existentes al tiempo que crea oportunidades económicas. En Guamúchil, el Museo Pedro Infante ancla un grupo de turismo cultural más amplio. A lo largo de la costa, las actividades de acuicultura sostenible se integran con el desarrollo para apoyar los objetivos económicos y ambientales

Un elemento central de nuestro enfoque es la conexión y preservación de los valles fluviales de Sinaloa y Evora alrededor de las comunidades existentes. Estos cursos de agua unen diferentes experiencias turísticas al tiempo que apoyan la biodiversidad y la vida comunitaria. El plan integra oportunidades de turismo relacionadas con la salud, incluidas las aguas termales, dentro de la oferta rural.

El marco resultante proporciona vías claras para diversificar la economía turística de Sinaloa, manteniendo al mismo tiempo el carácter auténtico y los sistemas naturales que hacen que la región sea distintiva.